Sábado, 07 de abril de 2012. Mc 16, 1-7
«¿Quién nos correrá la piedra de la entrada del sepulcro?» ¿Quién nos sostendrá con esperanza? ¡María! ¡Madre de la Esperanza! Sí, Nuestra Señora aun con la soledad, permanece con esperanza, con la fe firme en Cristo, que muere para darnos la Vida.
La Virgen María nos quita la piedra que nos desanima en la vida espiritual, la piedra que nos impide reconocer a Cristo, la piedra del pecado, la piedra de la obscuridad que nubla nuestro entendimiento, que nos impide ver al Señor, pues Ella con su presencia se aplasta la cabeza de la serpiente infernal, con su presencia no hay corazón que se resista. “siembra a María y cosecharás a Jesús”, Ella nos sostiene aun cuando no vemos a Dios.
Mamá, gracias por amarnos, gracias por cuidarnos, gracias por sostener los primeros cristianos y a toda la iglesia a través de la historia, gracias por darnos esperanza, gracias por enseñarnos a Jesus, gracia por sostenernos, gracias por ser la luz en el Camino, gracias porque tu compañía es inmensa, ¡qué sería de nuestra vida espiritual sin ti! Definitivamente, antes morir que vivir sin ti. Totus Tuus.
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