Viernes, 09 de marzo de 2012. Mt 21,33-43.45-46.
Los sacerdotes y fariseos comprendieron que aquella parábola de la viña y los trabajadores asesinos que se querían quedar con los bienes, se refería a ellos; quizás entendieron su hipocresía y ofensa a Dios, pero no decidieron cambiar.
¿Por qué no se convertían los fariseos? Algunos se no convirtieron, otros sí, la diferencia de esta actitud depende de la escucha al Señor, del vencimiento de los respetos humanos y del desear o no tener los bienes y dones de Jesús, de la capacidad de afrontar y vivir la Verdad.
¡Qué importante es la humildad! Qué bonito reconocer lo que Dios nos ha dado, escucharle y dejarse corregir. qué importante es glorificar al Señor por sus innumerables frutos.Totus Tuus María
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