Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora.
Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad, porque no hablará por sí mismo, sino que dirá lo que ha oído y les anunciará lo que irá sucediendo.
El me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes.
Todo lo que es del Padre es mío. Por eso les digo: 'Recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes'.
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Una madre tiene muchas cosas que decirle a su pequeño hijo, pero no puede decírselas porque nos las entendería. Tiene que decirle cosas sobre la vida, sobre el amor, sobre los valores, sobre la piedad, sobre Dios, etc... pero, no puede decírselas, porque es sólo un bebé.
¿Entonces, qué hace la madre? simplemente abraza al pequeño niño, y con eso le dice todo. Después, cuando el niño crezca y se sienta amado, comprenderá todo lo que le dijo su madre por medio de sus besos y abrazos.
¿Acaso este evangelio no está hablando de lo mismo? "Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora".
Todo por la Inmaculada, nada sin Ella.
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