Lunes, 25 de julio de 2011. Mt 20, 20-28
La Madre de los zebedeos pedía puestos en el Reino para sus hijos, ella no pidió nada para sí, pero aun no entendía como era el Reino, no sabía que no eran posiciones, sin embargo Jesús tiene paciencia, le explica y les enseña no solo con palabras sino con su mismo ejemplo.
Es fácil seguir los lineamientos del mundo, su mentalidad, pero hoy el Señor nos pide algo más, nos pide que lo imitemos, que miremos el corazón y no las apariencias, que tengamos su misma medida: EL AMOR
¿Cómo hacerlo? Con María, Ella es como la madre de los Zebedeos que todo el tiempo está postrada ante Jesús, pero con una enorme diferencia, Ella vive en el Reino de Dios, sabe qué pedir y cómo pedirlo, Ella nos enseña a vivir conforme al Evangelio, Ella es la que nos da la mirada en Clave de Eternidad.
María, danos tus ojos de Madre, de Mujer, de Santa para vivir eternamente con Dios en el Cielo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario