En el afán del hombre retar a Dios está su atrevimiento y fragilidad, tal cual le pasó al demonio en el desierto, aún sabiendo que Jesús era Dios y que no podría derrotarlo no soportó la tentación de tentarlo. Tal cual le pasó a los fariseos, tal vez en lo más profundo de su corazón había esa noción de que las obras de Jesús sólo podían ser obra de Dios, pero su maldad los llevó a mantenerse en guardia para tentarlo, trampa que buscaban ponerle era trampa en la que caían porque quién engaña a Dios?... en este pasaje Jesús conciendo aquello que había en lo profundo de su ser trata de que ellos mismos por su soberbia queden profundamente confundidos y cuestionados ante sus actos.
Que hoy el hombre mire su interior y busque que hay en él para que se de cuenta del gran vacío que yace en su ser a causa de la asusencia de su ser creador quien quiere llegar a llenar sus vacío y que tan sólo encuentra rechazo y reto, pero esto más a causa de su soberbia y ganas de grandeza... ya es hora de reaccionar! a Dios pertenece nuestra alma, a Dios pertenece por justicia todo nuestro ser y aún así queremos negárselo y darlo al mundo, caos de perdición y ruina de él mismo. Hoy Jesús podría decirnos al mundo lo que es del mundo: pecado y maldad y a Mí lo que me pertenece TU ALMA CON LOS ADORNOS QUE LE DI: potencias y virtudes.
Madre Tú sabías a quien pertenecías y por eso te donaste como esclava fiel; enséñanos a seguir tu ejemplo y decir como Tú "he aquí la esclava del Señor" y que en nuestro ser se imprima el sello divino del amor.
"SÓLO VENCIÉNDOTE, VENCERÁS"
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