Viernes, 05 de agosto de 2011. Mt 16, 24-28

¿Por qué querer irse con Jesús? Porque si se quiere ser feliz, la opción es Él, en su Amor respeta la libertad, pero seduce, enamora, mueve el querer nuestro, ¿Quién se ha atrevido a amarnos tan extremamente? Si conocemos  a Jesús, es imposible no querer irse con Él, es imposible querer algo que no sea Él. ¿Qué tanto queremos al Señor? ¿Contemplamos algo que no sea ÉL? ¿Qué tanto nos preocupamos por conocerle, por mover nuestros afectos hacia Él?

¿Por qué negarse a sí mismo? Porque hay que salir del egoísmo, porque el Amor implica renuncia, porque si no nos negamos no podremos mover nuestra voluntad hacia la Divina Voluntad, porque si no nos negamos viviremos esclavos del querer concupiscente, inclinado al desorden. Nos negamos para irnos con Jesús, maestro del negarse, del Sacrificio, de la Libertad. Cuando nos negamos somos libres, negarnos nos debe hacer felices porque seguimos la recomendación que nos hace nuestro Dios, porque así imitamos a la Virgen María, porque negándonos vivimos mejor la caridad.

¿Por qué cargar con la cruz? Porque el mismo Jesús, a quien seguimos, la cargó; ¿Quiénes seriamos nosotros para no cargar con ella? Porque la cruz nos hace fuertes en el Amor, porque la cruz nos une con Dios, porque en el camino al calvario estaba la Virgen María, porque al cargar con la cruz oramos, crecemos en la fortaleza, y nos mueve el abandono, la confianza y la admiración a Dios, que cargó la Cruz, nuestra Cruz, con amor heroico.

¿Por qué seguirlo? Porque de Él venimos y a Él debemos ir, porque es la fuente y sentido de nuestra existencia, porque Él es el Camino, la Verdad y la Vida, porque es la Felicidad, porque aún nos continua amando.

Ya no quiero, Señor, seguir preguntando más el porqué, quiero que todo tu evangelio se haga vida, que no me quede en razonamientos, que lo que me has enseñado me sirva para amar, que mi voluntad, mis actos sean coherentes, mi conducta sea conforme con tu Amor y mi vida esté plenamente unida a María, que hoy me una a tu corazón y repare tus heridas con mi fiat.