Jesús tenía intenciones de retirarse con sus discípulos a un lugar despoblado, pero se encontró con una multitud que lo seguía desde muy lejos. La cantidad de gente era impresionante, más de cinco mil hombres sin contar las mujeres y los niños.
¿Acaso Jesús no conocía las intenciones de esta gente? Claro que sí, él sabía que muchas de estas personas lo buscaban porque querían que los curara o que les hiciera algún favor, sin embargo Jesús aprovecha esta ocasión para evangelizarlos, e incluso, para alimentarlos materialmente.
Ahora mismo me pregunto ¿de dónde viene esa actitud de Jesús de no dejar pasar una sola oportunidad para evangelizar a las almas? De María. Ella le enseñó que tenía que orar en todo momento, hacer el bien en todo momento. María lo instruyó sobre las cosas del cielo y le explicó los pasajes de la Escritura. María alimentó a Jesús con un amor tal que sus acciones quedaron grabadas en su corazón.
¡Cuánto celo apostólico me falta! Soy demasiado cómodo. Cuando tengo la sospecha de que alguien no está siguiendo a Jesús sino que se está aprovechando para conseguir algo de comida inmediatamente lo juzgo en vez de aprovechar la situación para evangelizarlo.
Gracias por tus enseñanzas Jesús.
Todo por la Inmaculada, nada sin Ella.
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