El Espíritu del Señor está sobre Él porque Dios lo ha consagrado por la unción, él ha sido enviado para anunciar la buena nueva a los pobres, a anunciar la liberación de los cautivos y la vista a los ciegos y a dar libertad a los oprimidos” Es la palabra de Dios que ha anunciado a el mesías al hijo de Dios. Esta es la misión por la cual el verbo se hizo hombre, vino a anunciar la buena nueva, la salvación para los hombres, y en esa misión a dar libertad a los oprimidos y dar la vista a los ciegos, es el Señor que lo había anunciado y es en este evangelio donde Jesús mismo dice que se ha cumplido en ese preciso momento la palabra que Dios había dicho.
Nuestro Señor vino a darnos la libertad de los hijos de Dios, la libertad a las opresiones del pecado y de las injusticias humanas. Lo más impresionante es el “hoy” que dice Jesús pues ese “hoy” es actual, ese “hoy” que dice Jesús en la sinagoga representa el cumplimiento de la profecía de Isaías, sin embargo no se queda allá en la sinagoga sino que todavía es el “hoy” es el misias que viene a dar la liberación a los oprimidos por el pecado.
Madre santa enséñanos a comprender el misterio de la encarnación del verbo, enséñanos Madre de Bondad a entrar en el sagrado corazón de Jesús y permanecer allí para que sea desagraviado de tantas ofensas que se le dan. Señora a pesar de que el mundo trate de llevar a Jesús al despeñadero con su incredulidad permítenos ser testigos fieles de su palabra para que Jesús salga por en medio de la gente victorioso.
¡A ti madre querida, enséñanos a amar!
“Ad Maiorem Dei Gloriam per Mariam”
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