La Corrección fraterna me debe llevar, no a sentirme mayor que la persona que voy a corregir, sino todo lo contrario, debo sentirme más pequeño como me enseño rebajandome hasta el suelo para ayudarle a mí hermano a limpiarle de sus errores, como me enseño Cristo; me debe llevar con humildad a ver en la otra persona mis propias debilidades, si veo un error en mi projimo debo primero analizar si yo también cometo el mismo error y despues de corregirme si lo tengo también, podre con cariño y caridad cristiana a corregir al projimo, de esta manera no voy a caer en el error de corregirlo porque me disgusta en mi manera de ser, sino que lo voy a corregir reconociendo mí propia debilidad, comprendiendo la debilidad del projimo, dejemos que nuestra Madre nos corrija en la oración para que con el miímo amor con que élla nos corrige nosotros lo hagamos con los demas.

"Si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre del cielo. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" emcuanta fe nos gace falta para creer que Cristo está en medio de nosotros, si lo creyeramos nuestra vida seria la voluntad del Padre, porque intentariamos todos los días agradar a Cristo que vive en nosotros. Si vivimos con nuestra Madre del cielo son dos los que vivimos y si Cristo cúmple con lo que nos dice, entonces todo lo que le pidamos a nuestra Madre Él nos lo dará ya que Él nunca le niega nada a la Reina del cielo.

Madre concedeme la Gracia de vivir la consagración para vivir según tú voluntad.

San Antoni prega per me.