01 enero, 2011

“María conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón”

Madre , tú eres la creatura más perfecta de Dios y la que más lo ha amado y creo que esto se debe a que vivías en perpetua meditación y todo lo guardabas en tu corazón, es por eso que permanecías extasiada en amor a Dios; fue La meditación la que te llevo a conocerle más y por tanto a amarle más perfectamente.
Tú realmente entendiste que en el transcurso del día, Dios permanentemente habla al corazón en las cosas más pequeñas y sencillas, como una brisa, el cantar de las aves, las flores en el jardín, la sonrisa de alguien, el clima, los alimentos, la familia, un pobre y en fin… Dios es muy recursivo y busca la manera de enamorarnos con sus pequeños y tiernos detalles que regularmente los hombres ignoramos y hasta despreciamos.
Te ruego Madre de Dios que abras mi corazón a cada detalle, cada obsequio que Jesús día a día quiere regalarme, y que verdaderamente logre enamorarme plenamente de él.

No hay comentarios:

Search