Hay varios detalles que me gustaría resaltar: en primer lugar, el que pregunta es un escriba, pero la respuesta de Jesús va dirigida hacia todo Israel, como sacando enseñanzas de cada momento (esto me recuerda a Rodri); en un segundo momento, después de reconocer a Dios y profesar la fe, es necesario amarle, es decir, que cada palpitar del corazón se emocione con el dulce nombre de Jesús, pero esto no es lo único, también hay que inclinar nuestra alma, entendimiento, razón, acciones y voluntad a Dios, ésta es prueba de que las obras deben estar unidas a la fe.
El escriba reconoce que el Amor es su meta, el sentido de su vida, la perfecta oblación, holocausto y sacrificio, por lo tanto el Señor exclama: «No estás lejos del reino de Dios.», porque si tenemos convicciones sinceras, profundas y claras, podremos empezar a trabajar por alcanzar la meta de la santidad.
¿Que mas decir? Definitivamente, es tan impresionante, es tan excelente el objetivo, es demasiado reconfortante saber que es posible que al mirar a María nos llenamos de fuerza y motivación… Mamá te tenemos, ¡qué alegría! Gracias por ser la directora, la Señora de nuestra vida, queremos ser dóciles a ti, moldearnos en ti, sabemos que la santidad de tu mano es posible, ayúdanos a no perder ese primer amor, para vivir la caridad de forma heroica como tú.
Jessica Restrepo S.
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