A Isabel se le cumplió el tiempo del parto, es la misericordia de Dios expresada en la confianza y el camino recorrido por Zacarías e Isabel que a los ojos de Dios eran justos, y el Señor los miraba con Buenos ojos y aunque no tenían hijos el Señor siempre en su misericordia no se deja ganar en generosidad y da el 100 veces más. Juan fue enviado a dar el mensaje de conversión, es la voz que grita en el desierto, que grita la conversión de las personas, grita la conversión requerida para el mundo. Es el profeta que no le da miedo de lo que digan de él y habla en nombre de Dios denunciando el pecado y la injusticia, nótese que por esto le cortaron la cabeza.
"Y a ti niño te llamarán profeta del altísimo porque iras delante del Señor anunciando a su pueblo la salvación y el perdón de los pecados" es el llamado a allanar los caminos del Señor, pues como él mismo lo reconoce vendrá alguien más grande que él a quien él no merece ni desatarle las correas de las sandalias. De alguna forma a esto están llamados los apóstoles de los últimos tiempos a predicar como Juan a llamar a la conversión de los pecadores, a allanar los caminos del Señor, y esto predicando la verdad con entusiasmo, ardor en el corazón y eficacia en la palabra.
Señor haznos apóstoles tuyos que asi como Juan tengamos ardor en el corazón, prediquemos la Verdad que eres tú, y con tu gracia perfore los corazones de la gente.
¡A ti madre querida, enséñanos a amar!
"Ad Maiorem Dei Gloriam per Mariam"
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