“Practica la justicia, la piedad, la fe, el amor, la constancia, la bondad” La parábola del rico y Lázaro. ¿Cuál es la tarea del rico sobre el pobre? La tarea del rico es ayudar en las necesidades de este, que se encuentra en penumbra, el rico tenía la capacidad de ayudar a los demás y sin embargo no lo quiso hacer, no lo hizo pues su corazón era amarrado, su corazón era egoísta que no veía más allá de lo que le presentaba la caridad en frente de él.
El problema del rico fue su corazón, el problema del rico eran sus apego y que su “tesoro” eran sus bienes terrenos y allí estaba su corazón a diferencia del pobre Lázaro que no tenía con que incluso subsistir y sin embargo vivía de cara a Dios pues su premio fue la felicidad eterna, mientras que el rico tuvo la condenación eterna.
El pobre Lázaro estaba a la puerta del rico, esperando algo de él, esperando su caridad y ayuda. ¿Quién está a nuestra puerta pidiéndonos ayuda? ¿Quién está allí necesitado de ayuda?
Señor enséñanos a ayudar a los demás, enséñanos a tener caridad con mi hermano, con todo el que está necesitado.
¡A ti madre querida, enséñanos a amar!
“Ad Maiorem Dei Gloriam per María!
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